Jazmín es el blend de té verde más popular en occidente.

Se cosecha en primavera y se almacena hasta principios del verano, cuando las flores de Jazmín están floreciendo; las que luego se mezclan con el té y se almacenan liberando así el aroma y el sabor. Se obtiene un té verde con dulces aromas florales. 

La calidad y la frescura de las flores es la clave en el producto final y la gama de calidades es vasta. En taza su aroma resulta un verdadero elíxir, el jazmín sutilmente envuelve los sentidos, perfecto para iniciarse con blends florales.

El licor es de un color verde muy claro, refrescante y suave al paladar, con un final dulce y astringente, especial para disfrutar en cualquier momento del día.

Se suele beber en meditaciones o antes de dormir, por los beneficios que otorga el aroma a jazmín, tan bien desarrollado en aromaterapia.